He vuelto a ver en el umbral de sueños perfectos,
La figura de tu cabello ondulado
El destello sagrado de tus ojos violentos
Los buenos instantes de nosotros abigarrados.
Tus aspavientos dicen que pronto anochecerás
inocentemente tú, absoluta y efímera,
Labios de cristal en los que resuena un bésame,
mientras tu perfume trae a esta ciudad la primavera.
Dime tu excusa para esa inolvidable sonrisa
acaso el cielo, acaso el viento, acaso el verso,
Atrapada en una cristálida habitación de orquídeas,
te imagino etérea repartiendo tu primer incendio.
He soñado, mas de lo que he aprendido en todas mis vidas,
y sólo hay un argumento para tus idas y venidas
Deduzco impaciente de tu predecible escape trémulo,
que eres sueño, eres agua, o en el mejor de mis casos, eres tiempo.
-Cedrian Sigx